CASIDA DE LA ROSA de Federico García Lorca
La rosa no buscaba la aurora: casi eterna en su ramo, buscaba otra cosa.
La rosa, no buscaba ni ciencia ni sombra: confín de carne y sueño, buscaba otra cosa.
La rosa, no buscaba la rosa. Inmóvil por el cielo, buscaba otra cosa.
© Federico García Lorca